viernes, 23 de abril de 2010

Una visión primitiva de la política

El mundo al revés.


Por Primi Tivo

Finalmente Tatán I y su gabinete cuico sorprendieron a todos y mandaron su proyecto de financiamiento de la “reconstrucción” que incluye una “alza de los impuestos a las empresas”.

El mundo al revés, el gobierno de los empresarios propone el alza de impuestos. Es cierto que es poquito y que es por un período acotado de tiempo, pero igual les subieron los impuestos a las empresas.

Francamente no puedo sino declararme gratamente sorprendido pues en 20 años la desconcertación fue incapaz de ni siquiera mandar un proyecto de ley subiendo el impuesto a las empresas, pese a que en Chile tenemos una de las tasas impositiva más bajas de todo el mundo en lo que a empresas se refiere.

¿Qué dicen ahora los ex ministros de hacienda de los gobiernos desconcertados? ¿No era que no se podía subir los impuestos porque los empresaritos se podían enojar y dejar de invertir? ¿Y el acabo de mundo que pronosticaban, y siguen pronosticando, los economistas neoliberales cada vez que algún “gasfiter de la economía” osaba proponer una subidita de impuestos a las empresas?

¿Qué dicen los periodistas de la prensa alineada que atacaban cualquier propuesta que apuntara a redistribuir el ingreso y mejorar la recaudación fiscal?

A uno podrá no gustarle el gobierno de Tatán I ni las fuerzas políticas que lo apoyan, pero hay que reconocer que en esta oportunidad se anotaron un poroto y a la pasadita dejaron como las pelotas a los timoratos de los 4 gobiernos anteriores que se hacían en los pantalones cada vez que los empresarios alzaban la voz.

Bueno y en lo que se refiere al resto de los actores de nuestra política, lo más entretenido y penoso, por cierto, ha sido la “performance” del matrimonio candidato y sus bajadas y subidas. En general el espectáculo fue bastante lamentable y si a eso agregamos los comentarios, trascendidos, off the records, etc, la cosa fue de mal en peor, acusaciones cruzadas de machismo, feminismo, afán de figuración, egolatría, etc, etc. Todo esto en medio de la “Convención-reunión-conclave-vaya a saber uno que” realizado por los desconcertacionistas para lavar sus heridas post derrota electoral.

¿Qué quedó en limpio de la mencionada reunión? NADA.

Fue el fiasco más grande de los últimos encuentros de políticos, no es que de esos encuentros salgan cosas muy geniales o espectaculares pero siempre pasa algo digno de contarse, en este caso NADA. Al final todos quedaron agradecidos del round matrimonial, pues ocultó la pobreza franciscana de la reunión, la inexistencia de ideas nuevas, la nula autocrítica en fin el vacío más absoluto. Si al final inventaron que iban a proponer un plan para la reconstrucción que nunca fue.

De los flamantes nuevos integrantes del Congreso, los diputados del PC (Partido Comunista no Personal Computer, aclaración para los lectores más jóvenes), todavía no hay mucho que decir ni comentar, salvo su reclamo por el patinazo de Tatán proponiendo un Director de Gendarmería inaceptable.